viernes, 22 de junio de 2012

Sedas de la Deshora Solar

El trigo repite toda la mañana
por sí misma y por los aires
llenos del resplandor de la deshora,
llenos de la pérdida de una nube en el tiempo,
repletos de cofradías aladas

de todas las promesas
formadas
en esta orilla de aquellas olas.

El sol en las inclinaciones de los cielos indecisos
forma sus ansias en cada mirada,
en cada viento sobre tu rostro,
en cada segundo de tu boca
dividiéndose por la distancia.

El sol fuera de nuestras horas,
exacto tiempo de la ausencia de los quehaceres grises
en esta vibración,
esta nota musical,
del trigo,
del sol,
y del viento,
desde las dos miradas,
bajo las nubes heridas de la no tarde,
no noche,
no día

una danza
y las oriflamas de las voces exiliadas.

miércoles, 20 de junio de 2012

Órdenes (a R.)

I

"El extraño primer orden
tras la puerta
y el primer espejo roto."

El cuerpo
en la estática inversa,
en los puntos cardinales desarmados,
en la nebulosa de interminable sal;

en la marea
y en la orilla,
el cuerpo transparente.

Las manos ya no se nombran
cuando esgrimen aire confuso al mundo,
desde un cosmos abierto en el pecho
reverberando solares enigmas,
mediodías sin fin
que huyen de la noche.

II

"El segundo orden
y los espejos con sus números"

La noche reúne a los espejos perdidos,
junto a la blanca luz de la ausencia
y habla
junto al miedo del frío,
al miedo del siempre frío, como la muerte,
como la orfandad de las estrellas

el miedo
de la noche
apretando el cuerpo
hasta los huesos vibrantes del

LATIDO

que sacude la eléctrica negritud
con el pulso de una mañana en el recuerdo.

III

"El tercer orden
y el reverso de la nada"

Los espejos rearmados a tu alrededor
repiten las frases dichas desde todo el pasado
hasta que se rompan
con la fuerza de la voz desgarrada por el infinito,
en una palabra,
en una exhalación de fuego en el vacío,

en un eterno ir y venir
por los sagrados puentes al no lenguaje;

y los demás estamos de este lado,
esperando con los cálices llenos
de las flores del camino.